Tras el incremento de la factura media de la luz un 14% en marzo con respecto a febrero, parece que abril va a seguir la misma tendencia, alcanzando el precio más alto de los últimos 10 años.
Para algunos, esta subida se debe al incremento de precio de otros recursos como el CO2 o el gas. También se le achaca la gran demanda desde Francia, donde el mes pasado se vivió una ola de frío que hizo que España exportara más energía de la que importaba del país vecino por primera vez en años, convirtiéndose así en una pesadilla para los consumidores porque este hecho encarece aún más la electricidad en España.
“El mes de abril va camino de marcar un antes y después en la factura de la luz, y parece que esta tendencia alcista se mantendrá. De hecho, se augura una complicada segunda parte del año con precios medios por encima de los 60 €/MWh. España va camino de tener en 2021 el precio de la electricidad más caro de la historia, incluso por encima de 2018”, señala Edgar Imaz cofundador de SotySolar.
En todo caso, no parece que esto se vaya a detener. Además, en junio de este 2021 se producirá un cambio en las tarifas con discriminación horaria que también puede incrementar el importe de la factura. Todos los consumidores que estén acogidos a discriminación horaria tendrán que adaptar los consumos eléctricos a las horas donde menos cara sea la tarifa de la luz para que no se encarezca demasiado el recibo de la luz.
¿Cómo puede protegerse el consumidor?Con este escenario, la ya resentida economía doméstica en España sufre aún más, ya que se trata de un gasto familiar difícilmente prescindible. Asimismo, la pandemia obliga a los ciudadanos a pasar más tiempo en casa y, por lo tanto, a consumir más.
Afortunadamente existen ya alternativas energéticas aptas para todos los bolsillos y que permiten mantenerse al margen de las subidas de las eléctricas.
“Instalar placas solares en viviendas particulares o comunidades de vecinos ya está al alcance de todos los ciudadanos. La energía fotovoltaica permite ahorrar hasta un 60-70 % en la factura. Es más, sabrán desde el momento que tengan los paneles solares en casa, el precio de los kWh que producirán dichos paneles en los próximos 25 años. Con los recientes cambios del sector, la instalación de placas solares permitirá reducir de forma drástica la dependencia de compañías de suministro y sus vaivenes en los precios. Consumes la energía que producen tus paneles y te olvidas de sustos desagradables. Asimismo, prácticamente todas las comunidades autónomas tienen en marcha programas de subvenciones y las financiaciones disponibles hacen que esté al alcance de todos”, apunta Imaz.