Aplicados con la focalización, la intensidad y el ritmo adecuado, los masajes buscan reacciones específicas de la masa muscular con fines principalmente terapéuticos, deportivos y estéticos. Son terapias que consisten en la manipulación superficial y profunda de los músculos del cuerpo a través del frotamiento y la presión.
Existen varios tipos de masajes cultivados en distintas culturas a través del tiempo y cada uno tiene sus ventajas y aplicaciones específicas. Expertos de Kundalini Massages, un centro de masajes en Alicante, explican que este tipo de terapias buscan tonificar el alma y el cuerpo.
Distintas opciones de masajes holísticos
Kundalini Massages es un centro que cuenta con una amplia carta de masajes. Ofrecen el tailandés, voayeur, el BDSM, el Géminis y el Mutual. Dicen ser especialistas en el tántrico, a cuatro manos y el masaje cuerpo a cuerpo. Con cada uno de ellos se trabaja la anatomía de una manera particular para conseguir una experiencia estimulante.
Un ejemplo de ello es el tántrico, que es una combinación de erotismo y masaje. Según las masajistas de este experimentado centro, se trata de la sensualidad por excelencia.
El masaje tailandés es uno de los más famosos a nivel mundial, ya que es una terapia dirigida solo para los más atrevidos. Según las expertas de Kundalini esta terapia oriental que despierta todos los instintos sensoriales. Además, incrementa la flexibilidad de los músculos, ligamentos y tendones.
Experiencia distinta para parejas
Los masajes también constituyen una excelente alternativa para las parejas, ya que es una experiencia que genera complicidad y relajación. Estos, a su vez, aportan solidez, afecto y confianza entre los integrantes de la unión. En ese escenario, se fortalece el nivel de conocimiento mutuo y la comunicación se vuelve más abierta.
En el caso de centro Kundalini Massages, se ofertan la modalidad tailandesa, que incluye una sesión para ambos en el mismo tatami. En el masaje vouyerista, un o una masajista aplica el masaje a un miembro de la pareja mientras el otro observa.
Los especialistas consideran que, en las parejas, este tipo de experiencias estimula el afecto y mayores deseos de intimidad, saca a las relaciones de la rutina y propicia la mejora de la calidad del tiempo en la intimidad con el aporte de nuevos conocimientos y prácticas. Estas experiencias estimulan en el cuerpo la producción de hormonas de la felicidad, lo que genera sensación de bienestar.